¡construye, siente, experimenta, descubre, transforma, ama!

¡construye, siente, experimenta, descubre, transforma, ama, aprende, participa, escucha...!

martes, 15 de abril de 2014

Aprendiendo a jugar


Al escuchar la palabra juego tendemos a relacionarla con algo divertido, entretenido, pues esta, es la idea que la mayoría tenemos en mente. Sin embargo, el juego va mucho más allá que esta simple apreciación. Además de ser una actividad con un fin lúdico, sirve para aprender, relacionarse y compartir.

En base algunos autores relacionados con este concepto, podemos definir el juego como toda actividad voluntaria que no se dirige a obtener un fin en sí mismo, intenta provocar placer, es utilizado como una estrategia o herramienta educativa. El juego siempre ha ocupado un lugar importante y ha sido objeto de estudio por sus diferentes finalidades.

Entendemos el juego también como una actividad que estimula la creatividad, la imaginación, que puede ser dinámica o estática, y participativa o individual.
Así, identificamos el juego, como ya se apuntaba anteriormente, como una herramienta socioeducativa puesto que puede fomentar la cohesión grupal y el desarrollo personal.

El juego posee una serie de características. Destacamos las siguientes:
  • Libre, separada, improductiva, incierta, reglamentada y con cierta ficción en mayor o menor medida.
Por otro lado, en cuanto a las clasificaciones del juego, procedentes de Grecia, nos encontramos con la siguiente distribución:
  • Agon: Juegos de competencia, consiste en conseguir una superioridad ante el o los otros (deportes, juegos de salón, etc.)
  • Alea: Juegos de azar (bingo)
  • Mimicry: Juegos de simulación (paintball)
  • Ilinx: Juegos de vértigo, movimiento, que en la actualidad suelen darse en el ordenador.

Otra clasificación y ordenación del juego sería mediante los tipos de juego, encontrándonos con juegos de mesa, pudiendo ser estos de estrategia, cálculo, azar o habilidad, juegos de patio, calle o exterior, juegos de ordenador englobando a los de aventuras, simuladores y educativos y para finalizar, los grandes juegos.

En torno a la tipología de juegos distinguimos entre individuales, de oposición, cooperación y de cooperación-oposición (jugar entre equipos). Es importante señalar que los juegos siempre transmiten unos valores, y por lo tanto una cierta ideología.

Para finalizar, nos centraremos en las ludotecas, las cuales, son centrosr donde se guardan juegos y existe un lugar físico para poder jugar. Estas se enmarcan dentro de la educación no formal, realizando actividades para niños y adolescentes. Muchas de ellas llevan a cabo actividades educativas y posteriormente un tiempo libre de juego.

La principal función de una ludoteca, es desarrollar la personalidad del niño a través del juego y del juguete.

Para entender mejor el mundo de los juegos, se realizó una sesión llevada a cabo por la Asociación Impuls donde pudimos disfrutar de diversos juegos. La Asociación Impuls es una entidad sin ánimo de lucro que ofrece todo tipo de servicios y programas de animación sociocultural, educativos y de tiempo libre. Además, hemos contado con la participación del dueño de la tienda Homoludicus, que juntamente con los demás educadores y animadores de la asociación, nos han aproximado a algunos juegos de mesa con los que ellos cuentan.




Para finalizar diremos que, los juegos no solo están hechos para niños. Todas y todos, mediante el juego, podemos expresar sentimientos y emociones, así como desarrollarnos como personas.
Aprendamos a jugar. ¡¡Juguemos juntos!!

Maribel Bordal, Begoña Granell y Neus Zapater

lunes, 14 de abril de 2014

Experiencia con la Asociación Valenciana de Espina Bífida

Aprovechando que la pasada semana se celebró  la SAME (Semana de Acción Mundial por la Educación) queremos hacer referencia a ésta por la temática de este año: la diversidad funcional. Durante el día 9 de Abril se realizaron en la Facultad de Filosofía y Ciencias de la Educación, unas jornadas de actividades con el fin de hacernos partícipes de una educación inclusiva, para todos y todas.
Queremos hacer alusión a esto puesto que existe una vinculación con la exposición que hizo la Asociación Valenciana de Espina Bífida el pasado lunes 7 de Abril en clase.


Dos de los coordinadores de la asociación vinieron a mostrarnos el funcionamiento de ésta y nos presentaron algunos de los proyectos que llevan a cabo.

Generalmente, su principal objetivo está basado en la promoción del desarrollo global de las personas con espina bífida o patologías similares mediante la realización de una serie de actividades fundamentadas en la solidaridad, participación, confianza, mejora y superación personal.

Actualmente, llevan a cabo un proyecto en el cual generan actividades de ocio y tiempo libre tal y como son los campamentos, salidas diurnas y nocturnas y demás actividades. Además de su desarrollo personal y social éstas implican sensibilizar hacia la diversidad y apuntalar al cambio social para así hacerse visibles y obtener un trato de normalidad e igualdad.

Por otro lado, también se nos presentó la labor que se realiza en las viviendas tuteladas, pues la asociación posee un piso en el cual entre semana conviven diversas personas con este tipo de patología. Esta acción está proyectada con la intención de lograr un desarrollo integral de la persona que conlleve una autonomía personal, un fomento de sus habilidades sociales, una rehabilitación psicosocial, inserción laboral, formación académica y ocio y tiempo libre.

Esta exposición nos ha hecho partícipes de un tipo de patología que desconocíamos, y realmente es un ámbito de intervención de la educación social. Consideramos necesario la difusión de estos proyectos y darle rostro a la asociación, ya que es una forma de conocer la patología y sensibilizar a la población sobre esta.

A cerca de la asociación consideramos que desarrollan una labor muy completa, sobre todo por el valor de la asociación de facilitarles una autonomía personal y una capacidad de desarrollo social, haciendo a estas personas protagonistas de su propia historia.
Sabiendo que ante la situación actual estas asociaciones escasean de recursos, queremos revalorizar aún más la labor que llevan a cabo.


Maribel Bordal, Begoña Granell y Neus Zapater.

jueves, 10 de abril de 2014

Museo de etnología. Centre Cultural la Beneficencia.

“El museo de las prohibiciones”, así es como lo calificó una persona tras el pequeño incidente que ocurrió previamente al comienzo de nuestra visita al museo. Un guardia prohíbe la entrada de un juguete (monopatín) de una compañera al recinto. Este suceso da cuenta de la falta de flexibilidad por parte de este trabajador, pues de la misma manera que  se habilita un espacio para depositar objetos personales, se podría haber guardado en él sin inconveniente alguno.

No queríamos comenzar con la narración de esta nueva experiencia socioeducativa, sin antes expresar nuestra opinión acerca de dicho caso. Nos centramos pues en los aspectos socioculturales y educativos que pudimos observar en dicho espacio cultural, el museo.

En cuanto a su estructura, el museo se asemeja a una cárcel, ya que históricamente en él se encontraban todos los huérfanos porque se trataba de una casa de Beneficencia. Tras la transición, pasa a manos de la diputación, convirtiéndose al mismo tiempo en un espacio cultural. Actualmente, es un museo familiar de cultura popular y tradicional. En el momento que se reformó, pasó a tener un aspecto mucho más vanguardista, combinando su parte más moderna y la más rural.

No obstante, de todas aquellas salas con las que cuenta dicho museo, resaltamos el aula de didáctica, ya que es el espacio donde podemos operar en el campo de lo social como futuros educadores sociales. Podemos preguntarnos, ¿cuál es entonces el papel o la función del educador social como profesional en este tipo de espacios? La respuesta no es sencilla si polarizamos la función únicamente con la práctica de exposiciones o visitas guiadas. Pero, de la misma manera que las misiones del museo son diversas, también lo son las de un educador social en este espacio de educación no formal, desde dinamizar los grupos, organizar los espacios, hasta realizar visitas guiadas.

También, cuando se nos pregunta por el concepto de museo, solemos responder casi de manera automática, que son exposiciones. Sin embargo, la función de los museos no es únicamente la de mostrar y explicar la cultura, tradición o las costumbres en este caso valencianas, sino que tiene diferentes misiones como son

  • Proteger/conservar el patrimonio. 
  • Investigar.
  • Difundir y enseñar al público.
En el caso de las exposiciones a la que hacíamos referencia anteriormente, podemos encontrar tanto exposiciones permanentes como temporales. Las temporales. Como su propio nombre indica, son exposiciones que se exponen durante un periodo de tiempo determinado, mientras que como exposiciones permanentes cuentan con la ciudad, “l`horta marjal” y la “muntanya i secà”.

En cuanto a la metodología, de entre los aspectos más singulares y característicos resaltamos  la manera de comunicar, la importancia de cómo se comunica y no tanto de los contenidos que se transmiten, buscando siempre algún aspecto que conecte con la vida de los visitantes, ya que es esto mismo lo que tiene que guiar la actividad. Quizás, es esto mismo lo que se echó en falta en la narración de la visita guiada, pues careció de cuestiones hacia los visitantes, ya que en ningún momento se lanzaron preguntas abiertas que despiertan el interés de los asistentes.  

Además, es importante gestionar la didáctica, desde que se inicia una actividad o taller hasta que se consigue el “producto final”.

Los talleres son una herramienta para dinamizar a través de los juegos a un grupo. Concretamente, los tres que se realizan en el museo y segmentando a los grupos son el que se realiza con los niños, el “joc de l’horta” que se trata de una oca que representa el ciclo del cultivo y “enrol” mediante el cual se utilizan 16 personajes de la ciudad de valencia y se lanzan 36 preguntas a las que hay que responder. La finalidad de cada uno de los talleres es que el grupo identifique aspectos tradicionales y culturales de Valencia.

En todo lo anterior, hemos querido concentrar aquello que, como futuros profesionales del campo de lo social, se nos quiso comunicar de manera clara y concisa, pues es imprescindible que conozcamos otros espacios culturales y la manera en que se conecta con la cultura. Nos quedamos con una de las frases que guían las actuaciones de los profesionales que intervienen en el aula de didáctica, “es importante la organización de los espacios y tiempos adecuados, así como los recursos”. Y es que está en eso mismo, en la organización, el todo si lo que queremos en conseguir los objetivos que nos proponemos como profesionales. Sin una buena organización de los espacios y los tiempos, difícilmente podremos comunicar adecuadamente aquello que se pretenda.

Maribel Bordal, Begoña Granell y Neus Zapater



martes, 1 de abril de 2014

Los Museos como elementos patrimoniales

En la pasada entrada hacíamos referencia al patrimonio cultural, dentro de este encontramos los museos, espacios de educación no formal donde se almacenan elementos patrimoniales. 
De la misma manera, también se define como una institución cultural con carácter permanente, abierta al público, sin fines lucrativos, donde se conservan, estudian y en parte, se exponen los testigos ambientales, físicos, biológicos y sociales del mundo pasado y actual y de las realizaciones del hombre a lo largo de su existencia. 

Cuando pensamos en los museos, generalmente asociamos la función de estos a la de acercarse a una exposición cultural. Sin embargo, no hay que caer en el tópico de reducirlo y limitarlo a esta función, más bien hay que atribuir tres tareas o funciones.
La primera de ellas es la conservación, restauración y catalogación, la segunda función es la investigación, y por último, la tercera es la de difusión, la cual implica un diseño de exposición permanente (siempre está en el lugar) y temporales (los cuales explican una determinada función),  además implica tener en cuenta los visitantes (marketing) y llevar a cabo actividades didácticas como visitas y talleres.

Los museos han dejado de ser un almacenamiento de objetos para convertirse en un espacio y recurso de aprendizaje. Pero si esto implica educar, ¿cómo se aprende? ¿como facilitar la interacción?
Alejándonos de la idea, a la cual hemos hecho referencia del museo,  como mera exposición y almacenamiento, hallamos tres tipos de interacción que se pueden dar entre el objeto y el visitante, y en algunas mediante la mediación de un educador.

Destacamos tres tipos de interacciones: Hands on, la cual consiste en la interactividad manual. Desde nuestro punto de vista, consideramos esta interacción un tanto simplista, pues no se transmite conocimiento intelectual. En cambio, los otros dos tipos, tanto la interactividad intelectual ( brinds on) como la emocional (heard on) implican un conocimiento, un aprendizaje.
Es por esto, por lo que desde nuestra perspectiva como educadoras no nos situamos en la segunda generación de los museos, la cual está basada en la interactividad manual, porque creemos que no hay un trabajo de mediación para que se produzca aprendizaje. 
Este, es el caso del museo de las Artes y las Ciencias de Valencia.

Si lo importante es educar hay que tener en cuenta los diferentes visitantes, entre los cuales destacamos tres grupo: los grupos educativos, los familiares y personas con discapacidad. Destacar que estos últimos, actualmente, aún se encuentran con ciertas dificultades para acceder a los elementos. 

Si nos centramos en el tema de talleres encontramos dos planteamientos, el del Institut Valencià d'Art Modern (IVAM) y talleres, cuya finalidad va más allá de acercar el objeto a las personas, intentando que estas reflexionen.
Más concretamente, el primer planteamiento al que hacemos referencia (IVAM) tiene tres planteamientos de acercamiento:
a) Acercamiento intuitivo: que la obra hable por si misma
b) Acercamiento intelectivo: la fruición estética debe partir del conocimiento de la obra y su autor 
c) Acercamiento vivencial: comprensión del contexto de la obra a partir de la experimentación del proceso creativo del autor.



Begoña Granell, Maribel Bordal y Neus Zapater.